Valdecamellas

Valdecamellas es Herencia que se transmite de abuelos a nietos. Es un sueño familiar. Es ilusión. Es respeto por la Naturaleza. Es permiso para que se exprese a su antojo y conocimiento para conducirla hasta los sentidos sin alteraciones. Es conexión con la Viña Vieja, con el fruto escaso, con el cultivo tradicional. Es pasión por el esmero, por la autenticidad. Es sacrificio en la búsqueda de excelencia.

Para encontrar los orígenes  de Valdecamellas debemos remontarnos a principios del siglo pasado cuando la primera generación de viticultores de la familia decide ir a comprar sarmientos a La Rioja. Desde entonces, y hasta la actual cuarta generación, el trabajo y el cuidado de las 36 microparcelas de Viña Vieja han sido una constante.

Los vinos de Valdecamellas se crean en los viñedos. Por eso el proceso de elaboración es artesanal, natural y muy poco intervencionista.

La vendimia se realiza en cajas de 12 kilos y por variedades. La recepción al depósito se realiza por gravedad.

La fermentación alcohólica arranca de forma espontánea con las levaduras propias de la uva. No se utilizan correctores de acidez ni otros productos enológicos. Los vinos son trabajados durante el encubado mínimamente de forma manual y una vez al día.

La fermentación maloláctica se realiza siempre en barricas de roble francés y americano nuevas. La crianza se realiza en barricas de roble francés nuevas entre 6 y 16 meses en función de la añada.

Los vinos se embotellan siempre en primavera sin clarificar ni filtrar.